domingo, 24 de enero de 2010

EL JUEGO ELEGANTE

Piso' el acelerador...Escapar era otra vez un juego elegante que queria ganar.
Tres años atrapada y depronto la posivilidad de volver a ser hembra.El hijo de una amiga ,un hotel barato ylas caricias que no creia merecer...
Se llevo' muy poco en las valijas, dejo' llorando a sus hijos; talves mañana se arrepienta hoy solo piensa en volver ser de el.

domingo, 17 de enero de 2010

El cuarto oscuro

Escondida en el baño,vomita para sentirse mas liviana.Toma tres vasos de agua y
sale despeinada a la calle.
Decidida a no llorar se engaña sacando fotos de gente vacia que en realidad
no quiere conoser.
-El plaser encierra tanto dolor- Repite entre dientes y sigue culpando a los otros
por sus fuera de foco.

El cielo existe

Repitacon migo:
El cielo existe,prefiero estar aca .
Cimentando el laberinto de afuera hacia adentro, talves logre escapar de esos ojos
que detodas formas no me miran.

Mujeres indispuestas ,con brillo labial,
prometen sanar las heridas que vas a habrir. ..

Repita con migo :
No es mi culpa,
el cielo existe, pero no tengo tiempo de mirarlo.

sábado, 16 de enero de 2010

Huesos ajenos

Desperte escupiendo sapos por la boca...
Hago de mis rencores un cuentito ,
un poema (todavia no lo se)
Mis manos ociosas descubren el viejo plaser de escribir malas palabras y asi estoy bien.
no soy justo...
no soy bueno..Soy mesquino
hoy pienso en mis huesos antes que en los ajenos.

domingo, 3 de enero de 2010

EN VIAS DE EXTINCIÓN

Que el fuego queme lo que no somos y Dios perdone las noches que me dejás dormir solo.

Lo que nos separa no es la mala suerte o el orín de algún perro, somos nosotros que no nos animamos a cambiar. Mezclamos rutina con caricias despiadadas y decimos en voz alta que así alcanza, que estamos bien. Hacemos de cualquier gesto mezquino una declaración de amor.

PIRÓMANO

Primero me imagino la casa como era antes. En mi cabeza la vacío de muebles, fotos y personas (sentimentalismos inútiles que todavía preciso). Ahora sólo queda la cáscara lista para el fuego.

Pienso en la cajita de fósforos que le robé a mi tío porque tenía dibujada una chica desnuda. Me aferro al recuerdo de mis pequeños dedos prendiendo el primer fósforo, dejo que la llama me queme un poco y lo dejo caer. Un recuerdo sobre otro recuerdo y ya está...

Incineré la casa donde no fui feliz.